Combate a la desigualdad, clave para la democracia y la prosperidad compartida

Por Elías L Fonseca

*En evento celebrado en la UNAM, catedráticos e invitados extranjeros como Salvador Illa Roca, presidente de la Generalitat de Catalunya a la Universidad Nacional, coincidieron en lo dicho por el ganador del Premio Nobel de Economía, Joseph Stiglitzal, durante la reunión del G20, quien presentó los resultados del primer informe sobre la desigualdad en el cual destacó que existe crisis global de desigualdad con numerosas divisiones económicas y democráticas

Global Press Mx / Las democracias siguen siendo clave para nuestros países al igual que la idea de prosperidad compartida, como la implementada por el Gobierno de Cataluña, España, que no se puede desarrollar sin un contexto en el que todas y todos participemos y seamos beneficiarios de ella, consideró el coordinador de Humanidades de la UNAM, Miguel Armando López Leyva.

Durante la visita de Salvador Illa Roca, presidente de la Generalitat de Catalunya a la Universidad Nacional, López Leyva dijo que nada puede funcionar o entenderse si no se ataca la desigualdad en general: económica, social, pero sobre todo las más puntuales que atraviesan a nuestras sociedades, como la de género.

El doctor en Ciencias Sociales precisó: A través del conocimiento universitario y académico que construimos se puede contribuir a desactivar y difundir cambios en públicos más amplios para que se vaya creando un mejor futuro.

Enfatizó que debemos pasar por una modificación cultural para que entendamos que hay un conjunto de problemas que se deben atender, y que no es natural que existan las desigualdades.

Ante estudiantes y académicos de la Universidad reunidos en el auditorio Jorge Carpizo, de la Coordinación de Humanidades, Illa Roca ofreció la conferencia “Catalunya: tiempo de convivencia prosperidad compartida”, en la cual expuso los retos que enfrentan las naciones respecto a la democracia.

Puntualizó que entre ellos están la institucionalidad contra el gobierno; integración contra las fronteras; ciencia contra el negacionismo; y el humanismo contra la automatización. Cada uno inicia con reducción de las desigualdades y la defensa de la posición social.

A decir de Illa Roca, las desigualdades descontroladas provocan hostigamiento grave del contrato social que vincula a los ciudadanos con sus gobiernos e instituciones.

Si la democracia y las instituciones internacionales, al igual que la transición tecnológica y la ciencia no generan avances tangibles y oportunidades reales para mejorar la vida, entonces la gente las cuestiona, apuntó.

El mandatario español -quien visitó México con motivo de la Feria Internacional del Libro de Guadalajara 2025- recordó que en la reciente reunión del G20 el ganador del Premio Nobel de Economía, Joseph Stiglitz, presentó los resultados del primer informe sobre la desigualdad en el cual destacó que existe crisis global de desigualdad con numerosas divisiones económicas y democráticas.

El documento indica que 83 por ciento de los países tiene alto nivel de dicha condición y albergan 90 por ciento de la población mundial, por lo que ni moral ni económicamente se debe permitir un planeta desigual.

De acuerdo con Illa Roca, esta última no es un mal menor, ni una consecuencia inexorable de las economías, es una elección política y, por lo tanto, está en nuestras manos evitarla con mecanismos consensuados y políticas públicas ambiciosas.

Hoy en día en el mundo existen dos modelos económicos: prosperidad compartida y acumulación insolidaria; esta nos debilita, a largo plazo fractura y divide a las sociedades e instituciones. Por el contrario, la primera nos fortalece, impulsa el crecimiento y une a la población.

En este contexto, resaltó que en Cataluña, España, su gobierno apuesta por la prosperidad compartida ya que no se quiere un mundo de suma cero donde la mayoría pierde para que ganen unos pocos.

Ese modelo se basa en políticas públicas ambiciosas a favor del bienestar. En el siglo XXI sanidad y educación siguen siendo las estrategias más fusionadoras y transformadoras de la sociedad. En segundo lugar la colaboración público-privada que comparta objetivos comunes, donde el verdadero patriotismo es pagar los impuestos que te corresponden, aseveró.

Sería bueno que a partir de la política tomemos nota de cómo funcionan las redes colaborativas universitarias, por ejemplo entre las mexicanas y catalanas para compartir conocimiento y generar talento, finalizó.