Por José Luna
*Está en juego la vida de personas que acuden a instituciones públicas para atenderse una enfermedad, senadora Reynoso Sánchez
Global Press Mx / El que haya un recorte o un subejercicio presupuestal en materia de salud, conlleva a la falta de personal médico, equipo, estudios clínicos, medicinas y vacunas, lo que afecta de manera directa a las personas que no cuentan con seguridad social, señaló la senadora de Acción Nacional, Alejandra Noemí Reynoso Sánchez.
Por tal motivo, la legisladora presentó una iniciativa que busca reformar la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria, y la Ley General de Responsabilidades Administrativas, con el propósito de que se sancione a los servidores públicos que incurran en reducciones y subejercicios en programas presupuestarios y en inversiones dirigidas al rubro de la salud.
La propuesta enviada a las Comisiones de Anticorrupción, Transparencia y Participación Ciudadana y de Estudios Legislativos Segunda, busca que se incluya a la salud entre los rubros que no podrán tener un recorte presupuestal, ni a las inversiones dirigidas a su atención.
De igual forma, cualquier reducción o subejercicio en esta materia se considerará una falta administrativa grave, en los términos de la Ley General de Responsabilidades Administrativas.
Reynoso Sánchez refirió que, de acuerdo con el Informe sobre la Situación Económica, las Finanzas Públicas y la Deuda Pública, al cuarto trimestre de 2023, emitido por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, el ramo correspondiente a la Secretaría de Salud presentó un subejercicio de prácticamente la mitad de su presupuesto aprobado, por 103 mil 843.6 millones de pesos.
Indicó que, en 2023, el ramo Salud tenía un presupuesto programado de 209 mil 616.5 millones de pesos, pero sólo gastó 105 mil 772.8 millones. “Es decir, que ningún otro ramo administrativo del Gobierno Federal tuvo un subejercicio mayor que el de Salud”.
No es posible que se maneje el presupuesto de la salud de manera discrecional, sin que haya consecuencias, porque lo que está en juego son las vidas de seres humanos que acuden a instituciones públicas a curarse de sus enfermedades, concluyó.
